TEMPORADA 1. Cap 3 Despertar

Narra Sahila:
Miré alrededor, encontré a la persona, pero no esperé verlo, se veía raro, tenía la ropa de siempre, pero en sus ojos se reflejaban... Tristeza quizás o... 
Me perdí mis pensamientos que bajé la guardia, hasta que sentí que toda la parte de cemento se prendía en fuego con un movimiento de su brazo, el cual quedó alzado. Yo salte de mí banca para evitar quemarme, me puse en modo pelea, ¿lo malo? Era que solo había una entrada y era bloqueada por él. Hizo otro movimiento y me redujo más el espacio que tenía para moverme, así que empecé a mediar por las buenas la situación.
 
-Akio...- hablé con suficiente voz para que no se notará mis nervios- ¡baja tus llamas puedes provocar un incendio! - ahí me di cuenta de su brazo estaba temblando, no era Akio y que sus ojos eran fríos por lo que no era Aki- ¿¡Dark!? ¿Qué haces?, hablemos-
 
Dark era una de sus personalidades, pese a mi pedido lo ignoro, así que intente activar el elemental de agua, buscando en mi interior algo tan refrescante y fuerte como un huracán, e hice que saliera mucha agua derramándolas en una torre de agua, pero las llamas eran tan fuertes que no se apagaron. 
Cuando lo volví a mirar él no estaba en la entrada, su fuego bloqueaba el paso, mientras analizaba lo sentía estaba detrás mío, con una mano en mi cintura y la otra debajo de mi busto, deduje que había utilizado su otro poder, de la nada me empujó hacia atrás y quedé sentado, Dark se sentó de ordinaria manera, luego se acostó en mis piernas, se quedó mirándome unos momentos y puso un brazo en sus ojos.
Unos segundos después, me relajé y comencé a masajear el pelo de él, al rato él también se fue relajando, sus llamas se fueron apagando y todo quedó como si nada. A los 10 minutos vi a los Jett's con Drea.
 
-Sahila- su tono tan característico de Jett Serra- No hubo aquí fuego azul? Nos avisaron de ello, así que vinimos muy rápido.
-Si hubo fuego, pero fue una pelea simple con mi amigo- dije señalando a Akio- 
-Se parece a su ex -Serra menciono casualmente
-Usted es como medio tonto, claro que es su ex y el poder de él provocó las llamas- dijo Jett Sam
- ¿No te lastimo? - se pregunta Drea, y claro el poder de Akio podría hacerlo si me acercaba mucho-
-No, solo venía un poco estresado, me vio y ya- expliqué sin dar detalles - además que ya está dormido
-bueno, si necesitas algo llámanos estaremos cerca -dijo Drea
-la advertencia de Ed es que no haga un incendio, no le diremos que estás involucrada para no hacer más largo esto- dijo Sam
-gracias Drea, gracias Jett’s- mencioné y se fueron. 
 
Estuve así aproximadamente una hora, les avisé a los padres de Akio que estaba conmigo, ellos me explicaron lo que pasó y pidieron que me quedara con él hasta que se despertara. Claro no mencioné nada de Dark o el incendio que provocó, pues sus padres no sabían de eso. Me tensé cuando vi que se movía por lo que deduje que estaba despierto, pero aún me quedaba con la duda de que personalidad estaba.
 
- ¿Akio? - susurré - soy Sahila - ahí fue cuando recordé que no era su novia y que el ya no me quería-
-Sahila- pronunció como si no le importara quien fui, me miró con indiferencia, dolió- ¿Qué paso? ¿Por qué estás aquí?
-Dark...- 
 
Fue lo único que pude pronunciar, no entendía y dudaba que Akio supiera por qué ellos hacían eso, vi que se queda en silencio, moví la mano frente a sus ojos y no me volteo a mirar por lo que supuse que estaba en charla interna, así que le di espacio.
 
-Lo siento- dijo después de un rato- Ya acordé de que no volverá a pasar.
 
Termino de hablar y solo lo mire de reojo con la cabeza hacia su dirección dándole la espalda. Después de unos segundos de fue, no me miró... Debo aceptarlo: ya no tiene amor por mí.
 
-Princesa...- escuché en mi espalda y era Eros, otra de sus personalidades. Había bajado la guardia de nuevo - Hablemos tú y yo- Él era, según Akio, el más peligroso él no se contiene de nada. Así que solo me senté en la otra banca que había, Eros siguió lo que hice- bien, Akio no es capaz de decirlo, pero yo sí...-
-Ya sé -lo interrumpí- no aún no estoy lista para escucharlo, solo... Cuídalo- termine por soltar lágrimas, pero Eros no se fue, sino que espero a que me calmara- 
-Tonta, debes dejar que terminar - me miró con sus ojos fríos- Akio si ya te superó, pero yo no, tú eres mi luz, tú me das calma. Le pedí a Akio que te lo contara, ninguno se pone de acuerdo - dice tomándome de las mejillas. 
 
Él sabía que no podía hacerlo, no podía besarme, por lo que se fue. Yo me quede ahí, inetntando no llorar, pero me fue imposible, por suerte apareció Bri con su novia Angle, no recuerdo cómo fue exactamente, pero al final me llevaron a casa.
 
***
 
Narra Gwen:
Estábamos limpiando todo el colegio, literalmente, ayudando con los salones y con los jardines, estuvimos así toda la mañana.
Al terminar, yo me uní con mi hermano y Sahila, fueron hasta la biblioteca para devolver un libro, cuando llegamos había una mini fiesta entre los alumnos, Sahila devolvió el libro mientras mi hermano escuchaba hablar a los chicos, hasta que sonó una canción
 
- ¿Sahila? - dijo mi hermano llamando su amiga, - ¿Estas bien? ¿Qué ocurre?
-La canción
- ¿Qué pasa con eso?
-Es la canción que escuchaba con...
-Suficiente, vámonos - no la deje terminar, no debía recordarlo
 
Afuera Sahila seguida intentando tararear la canción, estaba más tranquila, pero con los ojos apunto de llorar. Mi hermano se había quedado atrás, pero llego con nosotras.
 
-No estaba el, y nadie puso la canción, aunque si cuando iba saliendo entro
-Que coincidencia- dije con ironía, así que miré a Sahila
-Tranquilos, solo... me falta tiempo
-Que tienes mi pollito- dijo galena llegando por atrás
- ¿Puedo contarles algo? Se me hizo raro
- ¿Qué cosa Sahila?
- Sentí que alguien me llamaba por mi nombre, con un tono ay no sé, pero era la voz de Akio
-Dios Sahila
-Era, no sé, pero me hizo llorar
 
***
Narra Akio:
Estaba en el piso de abajo de la biblioteca, había una pequeña exposición, cuando escucho esa canción... en ese momento la recordé
 
-Sahila... espérame para volver a ser amigos- mencione en mi interior
 
Fui a ver de dónde sonaba la canción, y era en la biblioteca, había un grupo de 10 escuchándola, entre ellos, estaba Bri
 
- ¿Quién la puso?
-No, no estaba en la lista
 
Todos estaban negando haberla puesta, pero por ahí había un amigo mío quien me saludo
 
-Hey, Akio
-Hola...
-Puedes creer que la canción salió de la nada
- ¿Estuvo Sahila por aquí?
-No la vi, porque la preguntas
-Nada
 
Apenas termino la canción, salí del lugar solo para verla irse con sus amigos
 
-No tienes motivos para decirle que se quede, la echaste- me recrimino Eros
-Cállate
-No, date cuenta que tus acciones hacen que te quedes solo- aquí vamos
-Siempre estuve solo, por culpa de ustedes dos
-Mentiras, ella te quiso ayudar- Dijo Eros
-Era hermoso estar con ella- Dark le complemento, haciéndome sentir culpable
-Ya no hay vuelta atrás
-Ella es la que nos quiere- contrarresto Dark
-Solo la quiero como una amiga
-"Ask me why my heart's inside my throat"- cantó Eros...
-No empiecen, déjeme tomar mis propias decisiones
-No digas que no te avisamos
 
Después de pelear con ellos, saque mi celular, puse música y camine hasta el parque donde nos escapamos la primera vez. Miré el lugar y me puse a llorar, es increíble como puedo llegar a ser imbécil.
 
Narra Eros:
Menos mal reconoce lo que es. Lo hemos acompañado toda su vida, y lo único que hace es alejar a las personas, solo ella sabe de nosotros, pero es tiempo de que madure, necesitamos una charla los tres, pero aún no, necesito librarme de esa niña.
 
***
Narra Sahila:
El 10 de julio, estaba con el profe Ed, estábamos planeando crear un cartel donde todos pudieran poner mensajes, recuerdos o dibujos, como especialidad debíamos poner todo.
 
-Aquí está mi profe. - di el dinero de una vez
-Venga, usted porque está así conmigo -podía ver a través de sus lentes lo que uno escondía 
-Con usted no es mi profe -le asegure para que no notara mi falta de entusiasmo
 
Después de dos días, cuando fui a la biblioteca por datos vi el mural, me acerque y e un rinconcito dibuje una mariposa, con una S de firma. Los Jett´s me vieron y los espere hasta que terminaran sus mensajes, claro, había un profesor vigilando que no hubiera el grosero escribiendo. Al volver al pasar vi que tenía un gato con una E al lado de mi dibujo
 
-E de Eros... -Me estremecí ante el pensamiento
-Sahila, ¿Ya puso lo suyo? - era Bri viendo el cartel
- ¡Si! ¡Ahora haz el tuyo!
-Nooooo- me dijo con una sonrisa- mejor vamos que tenemos que ir al salón
-Vale, mira este gato
-No empieces
-Lastimosamente es mi gato, bueno... mío no, pero si es dibujo de Gato- que bello apodo...
-Olvídelo
-Okey- dije sin resistir, no iba a caer, ya debía ir soltándolo, poco a poco
 
***
Narra Bri:
Sahila estaba en un salón de deportes, era muy resistente para nuestros poderes, perfecto para que aprendiera del elemental. Pero la niña obediente solo quería golpear la pared.
Así que me recosté en la pared cruzando los brazos
 
-Si le pegas así de duro, te va a devolver el golpe.
-No estoy de humor para tus frases. - no se dio la vuelta, siguió golpeando
-No necesitas estar de humor. Solo necesitas aprender a canalizar.
- ¿Qué derecho tienes de presumir que lo sabes todo? 
-No lo sé todo. -Fruncí el ceño- Pero sé lo que se siente perder el control. Y tú estás a punto de perderlo.
- ¡No me hables como si no pudiera con esto! -esta intentado contener muchas emociones
 
Así que guarde silencio, para que pudiera calmarse un momento
 
-No lo digo porque no puedas. Lo digo porque sé que puedes… pero sola, te vas a romper.
Sahila me observa, baja el puño lentamente, su respiración esta agitada
-Eres un arrogante, Bri. Siempre actuando como si te molestara ayudar, como si fueras mejor que los demás.
-Porque sé que soy el mejor, al menos en mi mundo. Pero a veces… el mejor no sobrevive sin los demás.
Hice una pausa, me acerqué, le extendí la mano, ella la acepto
-Recuerda, hay que sufrir para poder brillar. Así que, si te caes, voy a estar ahí para levantarte. Aunque no me lo pidas.
-Gracias Bri. -Hizo una pausa- Bueno empecemos con el entrenamiento
-Entonces me estás entendiendo. Vamos, primero...

***
Comenzamos bien la clase, la nueva profesora que remplaza al Profe Elias Varnholt.
 
-Hola jóvenes, mi nombre es Jennyfer, como sabrán, estoy haciendo el reemplazo al profe, y cuando él quiera volver, yo me iré, así que les cuento de mi... -Dio varias cosas y comenzaron a molestar los compañeros varones.

- ¿En dónde profe? - Dexter Idris, un leon por mutuacion, su personalidad le quedaba bien el animal: recochero pero muy frentero, sabia cuando hablar o jugar.
-Aquí en La Quebrada, si quieren ir a verme, voy los miércoles y viernes- Todos se reían ya que Dexter hacia caras, claro, no habría nada romántico solo era su manera de ser- y profe ¿Cuántos años tiene? -Le pregunto indecentemente haciendo que la profe se río
-Eso no se pregunta a una mujer, pero tengo 38, dentro de dos días 39
-Hay que traer el regalo y cantarle el cumpleaños- se pusieron a decir todos
 
La profe Jennyfer, se llevó muy bien con todos fue el único cambio que tuvimos nosotros, en cambio los de once no solo cambio con ella sino con Amaranta Luelma, según me contó Sahila. 
Después tuvimos clase de economía con Guillermo dos horas, claro también estaba en ciencias políticas, Sahila ama tanto a ese profesor, y me gusta la forma en que da la clase, pero esta vez nos puso a crear un negocio, y nos dio la idea basándose en el emprendimiento de él: hacer libros, no era escribirlos sino pegar las páginas y la portada, nos mostró uno llamado "El Fabricante de Lágrimas".
 
-Profe, ¿Puedo verlo?
-Claro que si
-Intente buscar el PDF y no lo encontraba, ¿Me lo presta?
-Primero termine el ejercicio y en el descanso de lo presto
- ¡Super!
 
Como si no leyera, alcanzo la pagina 77 en menos de 30 minutos, sorprendente habilidad.
Después, llego artística donde moví la silla al lado de Sahi
 
-A ver, esto... -Solo leí una parte del casi final- Sahila no -me puse a reír y rojo
- ¿Qué? - le señale el libro, lo miro y aparto la mirada, luego volvió a mirar- espera ¿Con quién?, ¿Pero si no se quieren?, ¿Cómo puede ser?
-No sé Sahila, pero jajaja
-Estas rojo- me aclaro lo que ya sabía.
- ¿Qué página era?

Nos dimos la tarea de buscarla para yo mañana leerla con más calma, luchamos buscándola, pero la hayamos: página 706.
Comenzamos a hacer el trabajo, el profesor era muy relajado, aunque es de reemplazo, todos lo aman. Sonó el timbre y Sahila busco a Guillermo para de volverle el libro.

-Profe Guillermo, gracias... ¿Mañana lo puede traer de nuevo, por fis?
-Bien, pero me busca, es que lo traje fue para mostrarle a otro profesor
-Aaaaa, está bien, gracias Profe. Vamos Bri, chao profe
 
Nos despedimos y ella fue contando todo lo que sabía hasta el momento.
 
***
Narra Eros:
Llego el día, íbamos a despedirnos de ella, nuestra luz, la que nos dejaba sacar lo peor y no se iba. Akio no quería lo que íbamos hacer, pero era necesario, solo así podría ser feliz y avanzar hacia la madurez, sin depender de nosotros.
Llegue al lugar acordado, ella tenía una camisa manga larga azul, y un pantalón negro, tenía recogido dos mechones uniéndolos para destapar su vista dejando el resto suelto. Akio hizo lo que habíamos acordado, llegamos a la pared y recostándose en ella. Sahila lo noto al rato, ella siempre llegaba más que puntual a todos los lados, se acercó detrás de la baranda saludando.

-Sahila, son ellos, quieren decirte algo.

Ahí me da el control, dejando una pausa para tenerlo todo, mi voz tiene otro matiz. me acerco a ella, poniendo mis manos en sus mejillas.
 
-Sahila. -intentaba no llorar- Si pudiera quedarme contigo… lo haría.
-Eros. - me reconoció
-Y yo la protegería con cada parte rota de mí. - deje que mi compañero también tuviera contacto con ella
- ¿Por qué hablan como si se fueran? - no, que no valla a llorar
-Porque estamos hechos para protegerlo…-Dije- no para romperlo.
 
Habíamos visto varias veces que le rompían el corazón las mujeres, así sea de chiquito, todo por no saber controlar sus emociones
 
-Nos duele amar lo que él intenta olvidar. - sus ojos se abrieron, pero no podíamos retractarnos ni hacer que nosotros tuviéramos el control de su vida
 
Akio baja la cabeza. Le damos el control a él para que termine de decirlo. Respirando hondo como si acabara de correr.

-Ellos… tomaron una decisión. -Lo acordamos- Sin preguntarme.
-Akio…
-Quieren que madure. -Nuestro cuerpo comenzaba a temblar- Que viva algo que no los necesite. Pero yo no sé cómo ser… solo.

La mano de Sahila aprieta la nuestra. Dándonos el apoyo de siempre. Firme pero triste.

-Entonces no estés solo. Pero empieza a ser tú. Solo tú.

Hay me di cuenta, que ella ama cada parte de nosotros, quizás no como antes, pero si lo hace, era tiempo de irme, Dark se unió primero y yo la mire por última vez, y recordé la razón por la que la amaba...

Narra Akio: 
Hubo un momento de silencio, Sahila me sostenía la mano que poco a poco dejaba de temblar, no escuche lo que les dijeron, me sentía más completo, pero a la vez vacío.
 
-Ya se fueron, creo que es momento de irme. - dije saliendo del lugar para irme a la casa
-Si necesitas ayuda aquí estoy
-Tranquila, estoy bien

***
Llegue a mi casa, mis padres me vieron y se preocuparon por mi estado de ánimo, les dije que me dejaran solo y me encerré en mi habitación.
Me mire al espejo, me quite lo más pesado de mi atuendo, y seguí observando, tenía aspectos de Eros y Dark, mis ojos con enojo y mi mandíbula tensada, estaba respirando hondo, hasta que sin más me derrumbe.
Todo el dolor que ellos había cargado por mí, lo comenzaba a sentir, solo lloraba, lloraba por ellos, por mí. Mi papá entro y me vio en ese estado, así que me ayudo a levantarme, y me abrazo, un abrazo que rara vez sentía así de cálido. Cuando me calmé, me senté en la cama.

- ¿Que tienes en el brazo?

Lo miré a él con confusión, luego ambos brazos, y me di cuenta de que había un triángulo cerca de mi muñeca derecha, las tres líneas eran diferentes, pero se unían.

-No sé, enserio - Reflexione un poco mientras decía esas palabras, eran un recuerdo de Ellos- Bueno, quizás... solo fue un recuerdo de amigos... 
-Lo hecho, hecho esta, pero más te vale ocultarlo, aunque esta pequeño, eso ayuda
-Ya sé cómo esconderlo, no te preocupes pa